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    Ginkgo biloba: una planta medicinal milenaria

    Ginkgo biloba: una planta medicinal milenaria

    El ginkgo biloba es una planta medicinal que se ha utilizado desde hace más de 2000 años en la medicina tradicional china. Se trata de un árbol de hojas verdes y en forma de abanico que puede alcanzar los 40 metros de altura. Su nombre científico es Ginkgo biloba L. y pertenece a la familia de las Ginkgoaceae, la única superviviente de un grupo de plantas que existía hace más de 200 millones de años.

    El ginkgo biloba tiene numerosas propiedades beneficiosas para la salud, especialmente para el sistema circulatorio y el cerebro. En este post te contaremos todo lo que necesitas saber sobre esta planta, su historia, sus beneficios, cómo usarla y qué precauciones debes tener en cuenta.

    Historia y origen del ginkgo biloba

    El ginkgo biloba es originario de China, donde se le conoce como "yin xing" o "árbol de plata". Se cree que fue el primer árbol que apareció en la Tierra y que sobrevivió a la era de los dinosaurios y a las glaciaciones. De hecho, se le considera un fósil viviente, ya que no tiene parientes cercanos en el reino vegetal.

    El ginkgo biloba se ha utilizado desde la antigüedad en la medicina tradicional china para tratar diversas dolencias, como el asma, la bronquitis, la impotencia, la pérdida de memoria, el vértigo y la depresión. También se le atribuyen propiedades espirituales y se le asocia con la longevidad y la sabiduría.

    El ginkgo biloba llegó a Europa en el siglo XVIII, gracias a los misioneros y comerciantes que lo trajeron desde Asia. Desde entonces, se ha cultivado como árbol ornamental en parques y jardines, y se ha estudiado científicamente por sus efectos terapéuticos.

    Beneficios para la salud del ginkgo biloba

    El ginkgo biloba tiene una gran variedad de beneficios para la salud, que se deben principalmente a sus componentes activos: los flavonoides y los terpenoides. Estos son antioxidantes que protegen a las células del daño causado por los radicales libres, que son moléculas inestables que se generan por el estrés, la contaminación, el tabaco y otros factores.

    Entre los beneficios más destacados del ginkgo biloba se encuentran:

    • Mejora la circulación sanguínea: el ginkgo biloba dilata los vasos sanguíneos y previene la formación de coágulos, lo que favorece el flujo de sangre y oxígeno a los órganos vitales. Esto puede ayudar a prevenir o aliviar problemas como las varices, las hemorroides, las úlceras, la hipertensión, las migrañas y las enfermedades cardiovasculares.
    • Protege el cerebro: el ginkgo biloba mejora la función cognitiva, la memoria y la concentración al aumentar el riego cerebral y estimular la actividad neuronal. También tiene efectos neuroprotectores, ya que previene o retrasa el deterioro cognitivo asociado al envejecimiento, al Alzheimer y al Parkinson. Además, tiene propiedades antidepresivas y ansiolíticas, que pueden mejorar el estado de ánimo y reducir el estrés.
    • Combate los síntomas del síndrome premenstrual: el ginkgo biloba puede aliviar algunos síntomas del síndrome premenstrual (SPM), como el dolor de cabeza, el dolor abdominal, la hinchazón, la irritabilidad y el cansancio. Esto se debe a que regula los niveles hormonales y tiene efectos antiinflamatorios.
    • Previene o trata las infecciones: el ginkgo biloba tiene propiedades antibacterianas, antivirales y antifúngicas, que pueden ayudar a prevenir o tratar las infecciones respiratorias, urinarias, intestinales y cutáneas. También refuerza el sistema inmunológico y aumenta las defensas del organismo.
    • Mejora la salud ocular: el ginkgo biloba previene o retrasa la degeneración macular, el glaucoma y las cataratas, que son enfermedades oculares relacionadas con el envejecimiento. Esto se debe a que mejora la circulación ocular y protege a las células de la retina del daño oxidativo.
    • Mejora la salud sexual: el ginkgo biloba puede mejorar la libido y la función sexual tanto en hombres como en mujeres, al mejorar la circulación genital y equilibrar los niveles hormonales. También puede ayudar a tratar la disfunción eréctil y la eyaculación precoz en los hombres, y la sequedad vaginal y los trastornos del orgasmo en las mujeres.

    Cómo usar el ginkgo biloba

    El ginkgo biloba se puede utilizar de diferentes formas, según el objetivo que se quiera conseguir y la preferencia personal. Las formas más comunes son:

    • Infusión: se puede preparar una infusión de ginkgo biloba con las hojas secas de la planta, que se pueden comprar en herbolarios o tiendas especializadas. Se recomienda tomar una taza al día, preferiblemente por la mañana, para aprovechar sus beneficios. No se debe hervir las hojas, sino dejarlas en agua caliente durante unos 10 minutos.
    • Tintura: se trata de un extracto líquido de ginkgo biloba, que se puede obtener en farmacias o tiendas naturistas. Se recomienda tomar entre 15 y 30 gotas al día, diluidas en agua o zumo, según las indicaciones del envase o del profesional de la salud.
    • Cápsulas: son una forma cómoda y práctica de consumir ginkgo biloba, ya que contienen una dosis estandarizada de sus principios activos. Se pueden encontrar en farmacias o tiendas naturistas, y se recomienda tomar entre 1 y 3 cápsulas al día, según las indicaciones del envase o del profesional de la salud.
    • Crema: se puede aplicar una crema de ginkgo biloba sobre la piel para tratar problemas como las varices, las hemorroides, las úlceras, las heridas, las quemaduras o el acné. También tiene efectos hidratantes y rejuvenecedores. Se puede comprar en farmacias o tiendas naturistas, y se recomienda aplicarla dos veces al día sobre la zona afectada.

    Precauciones y contraindicaciones del ginkgo biloba

    Aunque el ginkgo biloba es una planta segura y bien tolerada por la mayoría de las personas, hay algunas precauciones y contraindicaciones que se deben tener en cuenta antes de usarla:

    • No se recomienda su uso en niños menores de 12 años, mujeres embarazadas o lactantes, personas alérgicas al ginkgo o a otras plantas similares, personas con trastornos de coagulación o que toman anticoagulantes o antiplaquetarios, personas con epilepsia o que toman anticonvulsivantes, personas con hipertiroidismo o que toman medicamentos para regular la tiroides.
    • Se debe consultar con el médico antes de usar ginkgo biloba si se tiene alguna enfermedad crónica o se toma algún medicamento de forma regular, ya que puede interactuar con algunos fármacos como los antidepresivos, los antihipertensivos, los diuréticos, los hipoglucemiantes o los inhibidores de la monoaminooxidasa (IMAO).
    • Se debe respetar la dosis recomendada y no excederla, ya que puede causar efectos secundarios como náuseas, vómitos, diarrea, dolor de cabeza, mareos, palpitaciones o reacciones alérgicas.
    • Se debe suspender el uso de ginkgo biloba al menos dos semanas antes de someterse a una cirugía o a una prueba diagnóstica que requiera anestesia, ya que puede aumentar el riesgo de sangrado.